Un mundo oculto (I)

Estaba oculto entre la maleza, cuando tomé esta fotografía, el puente de Besalú.

Sección del Puente de Besalú(I)

Una sección del Puente de Besalú en la Garrotxa.

Panorámica del Puente de Besalú

Es tarde. Se está poniendo el sol en Besalú. Capto esta bellísima imagen antes de irme a casa.

Vista panorámica de este magnífico puente románico de Besalú.

El puente de Besalú

El puente de Besalú- el Pont Vell de Besalú- es un hermoso puente románico del siglo XI. Este puente pertenece al municipio de Besalú en la comarca de la Garrotxa.

Volcán Santa Margarida de Olot.

El despertar de la inocencia

Todos tenemos nuestra propia visión sobre el despertar de la inocencia. No existe una única percepción de ese despertar. Ni una única forma de experimentarlo ni de comprenderlo. Dejemos, entonces, que se manifieste libremente, sin restricciones.

Muerte y Decrepitud en el ócaso de una vida

¡Observen esta flor! Está en el ócaso de su vida. Lentamente, se marchita ante mis ojos. ¡Es hermosa! A pesar de su decrepitud. Me fascina su color rosado y su textura rugosa. Esta rosa me enseña a aprender a morir y a su vez a aprender a vivir. Es una de las grandes enseñanzas que podemos aprender a lo largo de la vida.

La Muralla de la Ciudadela de Roses

 

 

La Ciudadela de Roses es un hermoso recinto amurallado, heredado del pasado griego y posteriormente romano del pueblo de Roses. Construido por los griegos hace más de 2.300 años, me parece majestuosa e impresionante: estas fotografías atestiguan en parte esa belleza.

Es un atardecer de invierno en la Ciudadela de Roses. Un gélido día que transcurrió con calma. Tomaba fotografías de las murallas de la Ciudadela. Fotografías que- como podéis ver -son de un atardecer solitario, acompañado sólo por el sonido del viento, de los coches de la carretera circundante y de los graznidos de los pájaros.

Serenidad en medio de una tempestad

Trazando caminos

Esta imagen me evoca sosiego. Tranquilidad. Calma. Un destello de luz atraviesa suavemente la imagen del árbol solitario. ¡Qué callado está! Hay en él, una enorme paz que no es interrumpida por ningún hecho pasajero ni externo. Está profundamente conectado. Enraizado en este paisaje bucólico, propio de un cuento de hadas. Desprende un dulce aroma. Apoyada en el tronco, siento su fortaleza y su tenacidad. ¿Cómo ha superado todo tipo de adversidades? Quizás, el secreto está en cómo afrontamos la vida: cómo damos forma a nuestra vida y trazamos caminos.